Viaje a Alemania: Circuito Alemania

Día 1: España-Múnich. ¡En marcha hacia Alemania!

Ha llegado el momento que tanto estabas esperando. ¡Por fin comienza tu escapada a los lugares más espectaculares de Alemania! ¿A qué estás esperando? Venga, corre, prepara la maleta y asegúrate de que no te dejas nada. Llevas días pensando en qué llevar, pero no está de más que revises todo tu equipaje antes de salir de casa. ¿Lo tienes todo? ¡Pues adelante! Recuerda que, al ser un vuelo internacional, tienes que llegar al aeropuerto al menos dos horas antes de la salida del avión.

Cuando aterrices en Múnich, una vez que hayas recogido tu equipaje, un autobús te estará esperando a la salida para llevarte directamente hasta tu hotel. Deja las maletas en tu habitación y prepárate a disfrutar porque tienes el resto de la jornada libre. ¿Qué te apetece hacer? La mejor opción es hacer una primera incursión por las calles del centro de la ciudad y captar el encantador ambiente de la capital bávara.

Antes de regresar a tu hotel, escoge una cervecería para brindar por tu viaje. Y cuando llegues, no te olvides de pasar por la recepción, donde el guía te estará esperando a la hora convenida para explicarte todo lo concerniente a tu viaje. Para terminar tu intensa primera jornada en Alemania, disfruta de la cena en tu hotel antes de descansar en la habitación.

Día 2: Múnich. A la conquista de la capital de Baviera

Amanece en Múnich y tú afrontas la primera jornada completa de tu recorrido por Alemania. Múnich está ahí fuera, aguardando con decenas de lugares que visitar. Venga, da buena cuenta del desayuno en tu hotel y escucha todas las historias que el guía de habla hispana tiene que contarte durante una completa visita panorámica por la capital de Baviera. Dedícale tiempo a la Marienplatz porque ahí se concentra buena parte de la esencia de la ciudad. Fíjate en que cuenta con los dos ayuntamientos muniqueses, el Viejo gracias a sus más de 500 años, y el Nuevo, un peculiar edificio neogótico que, además, te regalará excelentes vistas desde lo alto de su torre.

Antes de salir, hazte una foto en la Columna de Santa María y el famoso Fischbrunnen, donde cada miércoles de Ceniza los lugareños sumergen un monedero vacío para, en teoría, llenarlo de dinero el resto del año… ¿Quieres seguir caminando por Múnich? ¡Alto ahí! No te puedes ir de la Marienplatz sin ver su famoso Glockenspiel , el carillón del Ayuntamiento nuevo que hace las delicias de turistas y locales tres veces al día. Una vez que lo hayas contemplado y grabado, puedes seguir tu camino paseando por la siempre animada Maximilian Strasse y visitar posteriormente la Villa Olímpica –las vistas desde la Torre son excelentes-. No te pierdas el edificio de la BMW, una sede futurista que dejará con la boca abierta a los amantes de los coches, o la iglesia de San Pedro, el templo católico más antiguo de Alemania.

El resto del día está a tu entera disposición. Tienes dos opciones. Por un lado, diseñar tu propia ruta y seguir conociendo nuevos rincones de Múnich, como su catedral, la espectacular Odeonsplatz o sus famosas cervecerías, entre las que destaca la Hofbräuhaus. La otra posibilidad es unirte a la excursión opcional al castillo de Neuschwanstein.

Es uno de los edificios más fotografiados de Alemania y en cuanto lo veas de lejos entenderás el porqué. Una impresionante fortaleza levantada en una época en la que ya no hacían falta construcciones así… salvo para la imaginación del rey Luis II, que gastó toda su fortuna en levantar ese castillo. Disfruta de este impresionante edificio antes de regresar a Múnich para descansar en tu hotel porque mañana la ruta sigue…

Día 3: Múnich - Regensburg - Núremberg. Una jornada llena de historia

Un consejo para empezar tu tercer día en Alemania: desayuna con energía en tu hotel porque hoy te espera una intensa jornada por alguna de las ciudades más espectaculares del país. En cuanto termines la primera comida del día, te pondrás en marcha hacia tu primer destino: Regensburg –en castellano, Ratisbona-. Allí te espera un casco histórico reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 2006.

La ciudad apenas sufrió daños durante la Segunda Guerra Mundial, así que su estado de conservación es inmejorable. Para comprobarlo, contarás con tiempo libre para moverte a tu aire por el centro de la localidad. Lo mejor que puedes hacer es dejarte llevar y pasear con toda tranquilidad, aunque hay algunas cosas que no puedes dejar de hacer. Por ejemplo, contemplar las vistas desde el Puente de Piedra, levantado en el siglo XII, fotografiar la catedral de San Pedro o visitar el Schloss Thurn und Taxis: seguro que te sorprende su colección de carruajes.

A la hora indicada por la organización, el autobús se vuelve a poner en marcha para llevarte hasta Núremberg. Después de almorzar, un guía te acompañará en un recorrido panorámico por los grandes atractivos de la ciudad. La segunda ciudad más poblada de Alemania mantiene ese aire medieval pese a sufrir graves daños durante la Segunda Guerra Mundial.

Seguro que te va a encantar adentrarte en su casco histórico cruzando alguna de las diez puertas de su muralla o perderte por las encantadoras callejuelas de los barrios de San Sebaldo o de San Lorenzo. Disfruta también del soberbio castillo Imperial, la Hauptmarkt –la plaza principal de la ciudad- o la preciosa Weissgerbergasse, donde las casas de los artesanos medievales se han transformado ahora en tiendas de diseño y bares. Un buen sitio donde tomar algo antes de ir al hotel a cenar y descansar.

Día 4: Núremberg - Rothenburg ob der Tauber - Würzburg - Frankfurt. Cuatro ciudades en un solo día

Y si la jornada de ayer fue intensa, prepárate para la de hoy. Cuatro ciudades en un solo día. ¡Y vaya cuatro ciudades! De inicio, despertarás en rodeado de edificios medievales en Núremberg. Saborea de un desayuno tan especial antes de ponerte en marcha de nuevo hacia una localidad absolutamente espectacular.

Dicen que Rothenburg ob der Tauber es el pueblo más bello de la ya de por sí bonita Ruta Romántica. Y por algo tiene esa fama porque parece un lugar sacado de un cuento de hadas. Disfrutarás de tiempo libre para poder caminar a tu aire por sus encantadoras callejuelas, cruzar las puertas de sus murallas, subir a sus torres, fotografiar su precioso ayuntamiento y adentrarte en sus estrechos pasadizos. La fortaleza roja junto al río te va a encandilar para siempre…

Después del almuerzo, la ruta continúa. Tu próximo destino es Würzburg, otra ciudad con muchos atractivos para el visitante ya que, no en vano, también forma parte de la famosa Ruta Romántica. Date un paseo por la Markplatz, sorpréndete con el rojizo interior de la Marienkapelle o fíjate en los dos relojes del bonito ayuntamiento. No te pierdas la catedral de St Kilian –es la cuarta más grande de Alemania-, la soberbia fortaleza de Marienberg o el despampanante Palacio Episcopal, reconocido por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.

Para completar la jornada con cuatro ciudades, tu ruta continúa hasta Fráncfort, donde dispondrás de tiempo libre antes de cenar y descansar en tu hotel. Aprovecha para pasear por el centro, disfrutar de las vistas desde lo alto de la Torre de Meno, visitar alguno de sus excelentes museos o adentrarte en el curioso Jardín de Palmeras.

Día 5: Frankfurt – España. ¡Hasta siempre, Alemania!

Llegó la hora de hacer de nuevo las maletas. Esta vez toca regresar a casa, así que hay que hacerle hueco a los recuerdos que has ido acumulando a lo largo de tu intenso recorrido por Alemania. Después de disfrutar del desayuno en tu hotel de Fráncfort, contarás con tiempo libre hasta la hora que te indiquen desde la organización.

Puedes aprovechar para visitar con otra luz el centro de la ciudad, hacer una incursión rápida en alguno de sus museos o probar alguna especialidad germana en sus restaurantes típicos. Eso sí, a la hora prevista, regresa al hotel y ten todo tu equipaje preparado para subirte al autobús que te llevará directamente hasta el aeropuerto. Auf wiedersehen, Deutschland!