Viaje a Holanda: Circuito Escapada a Ámsterdam

Día 1: España – Ámsterdam. Parques y flores

Ha llegado el momento de salir camino de Ámsterdam. Llegaremos al aeropuerto con tiempo suficiente, (al menos dos horas antes de la salida del vuelo), para realizar todos los trámites necesarios antes de embarcar hacia una de las ciudades más hermosas de Europa. Todos tenemos en nuestra imaginación los canales que reflejan sus bonitas casas, los parques y los coloridos mercados de flores. Pero, además, la capital de Holanda es una ciudad moderna y muy amante de la libertad. Seguro que el vuelo se nos pasará rápidamente mientras repasamos todo lo que tenemos previsto hacer. En cuanto aterricemos, nos trasladarán directamente al hotel, donde podremos registrarnos y dejar nuestro equipaje. El resto del día será libre para emplearlo como mejor queramos hasta el momento de regresar al hotel a pasar la noche.

Día 2: Ámsterdam - Gran Dique - Giethoorn – Ámsterdam. Conociendo los pólderes

Durante la jornada de hoy conoceremos como, a lo largo de la historia, los holandeses han sido capaces de ganarle terreno al mar. Así pues, terminado nuestro desayuno, saldremos hacia el norte y seguiremos la costa este del Ijselmeer, el lago más importante de los Países Bajos, un enorme lago artificial que anteriormente formaba parte de mar abierto, hasta que en 1932 fue cerrado por un enorme dique. El lago es alimentado por el río Ijsel, y hoy es una enorme reserva de agua dulce para el país. Parte del lago ha ido cubriéndose de pólderes (tierras cerradas mediante diques y después desecadas por bombeo y dedicadas, sobre todo, a la agricultura), hasta tal punto de que en 1986 se creó una nueva provincia, Flevoland, cuyo territorio está formado exclusivamente por tierras ganadas al agua. Visitaremos algunos de estos nuevos pólderes, como los que hicieron que, a mediados del siglo XX, la antigua isla de Urk se conectara con tierra firme.

Después de visitar estos impresionantes paisajes, pondremos rumbo a la ciudad de Giethoorn, conocida como la “Venecia de los Países Bajos”, ya que sus bonitas granjas con tejado de paja están situadas en islas conectadas por más de 170 puentes, de tal manera que las calles han sido prácticamente sustituidas por canales. Sus habitantes se mueven de un lado a otro en unas embarcaciones llamadas “punter”, (equivalentes a las góndolas venecianas). Antes de almorzar, realizaremos un paseo por sus canales y, en cuanto terminemos, atravesaremos el gran dique de Oorsteschelde, una de las mayores obras de ingeniería que jamás ha llevado a cabo el ser humano y conocido como la octava maravilla del mundo. Este dique de 9 kilómetros de longitud, tardó diez años en construirse.

Después, regresaremos a Ámsterdam a través de los pólderes más antiguos de Holanda pasando por bellos pueblecitos como Twisk y Opperdoes y, al final del día, volveremos al hotel para cenar y pasar la noche.

Día 3: Ámsterdam. Una ciudad única

Hoy después del desayuno, vamos a conocer Ámsterdam a través de una visita panorámica por sus edificios y monumentos más emblemáticos.

Visitaremos la Plaza Dam, la más importante de la ciudad, considerada el centro neurálgico de Ámsterdam. La plaza está llena de palomas y artistas callejeros y, además, concentra algunos de los edificios y monumentos más importantes de la ciudad, como, por ejemplo, el Monumento Nacional, erigido el 4 de mayo de 1956 en recuerdo de los caídos en la Segunda Guerra Mundial. También, en uno de sus lados, encontramos el imponente Palacio Real, que, hasta hace 350 años, era el ayuntamiento de Ámsterdam, momento en que el rey Luis Napoleón Bonaparte decidió convertirlo en palacio. Es una de las tres residencias que el rey de Holanda tiene en la actualidad, aunque, generalmente, se utiliza para actos solemnes y no como vivienda real.

Pasaremos por el Mercado de las Pulgas; la casa de Rembrandt, hoy reconstruida para devolverle el aspecto que tenía en el siglo XVII, cuando vivía en ella su célebre dueño; el Mercado flotante de flores, en funcionamiento desde hace 140 años y uno de los lugares preferidos por los habitantes de la ciudad para comprar plantas; la Plaza de los Museos, donde encontramos el Rijksmuseum, el más importante de Holanda, o el Museo Van Gogh; el barrio judío, etc. El almuerzo estará incluido para quienes hayan optado por la opción de “todo incluido”.

Después de almorzar, tendremos el resto del día libre para seguir conociendo la hermosa y llena de vida capital de los Países Bajos, o para visitar alguno de sus museos. Cena incluida para quienes hayan elegido a opción de “todo incluido”. Al final del día volveremos al hotel para disfrutar de una merecida noche de descanso.

Día 4: Ámsterdam. Museos, canales y bicicletas

En esta nueva jornada, después del desayuno, tendremos el día libre para seguir recorriendo Ámsterdam a nuestro aire. Sin embargo, quien lo prefiera tendrá ocasión de hacer una excursión opcional para conocer algo más de los alrededores de la capital holandesa. Por ejemplo, ir a conocer Zaanse Schans, conocido popularmente como el “pueblo de los molinos”, ya que en sus alrededores se construyeron, en el siglo XVII, aproximadamente seiscientos, que se utilizaban para moler especias y producir pintura, tintes, etc. En esta bonita localidad pasearemos entre sus pintorescas casas de madera, almacenes y, por supuesto, molinos de viento. Además, esta excursión opcional nos dará oportunidad de recorrer algunos de los pueblos marineros de los alrededores y comprobar cómo las diferentes comunidades culturales y religiosas del país viven en armonía desde hace siglos.

Por ejemplo, encontramos la bonita ciudad de Marken, situada en una península, de religión protestante y donde se han conservado vivas las tradiciones a lo largo de los siglos, cosa que se aprecia en sus calles, y en sus habitantes. Conoceremos la católica Volendam, una de las localidades más bellas y turísticas de los alrededores de Ámsterdam, fue, en la antigüedad, un lugar de encuentro de peregrinos y misioneros y hoy, es un lugar perfecto para pasear, realizar compras y saborear exquisitos platos de pescado propios de la zona. La cena estará incluida entre las actividades del día para quienes haya elegido la opción de “todo incluido”. Al final del día, regresaremos al hotel para pasar la noche.

Día 5: Ámsterdam – España. Decimos adiós a los Países Bajos

Nuestro viaje a Ámsterdam ha llegado a su fin. Después de desayunar y recoger nuestras cosas, tendremos algo de tiempo libre hasta la hora en que nos recojan para llevarnos al aeropuerto. La estancia en la capital de Holanda ha sido más corta de lo que hubiéramos querido, pero, aun así, hemos podido conectar con esta ciudad tan sorprendente y llena de historia y con sus habitantes. Seguro que no olvidaremos estos días. Ahora toca empezar a planear nuestro próximo viaje con la seguridad de que nos volveremos a encontrar en cualquier parte del mundo. ¡Buen viaje y hasta pronto!