
Vietnam: Vietnam Clásico
- Duración
- 11 días
- Tipo de circuito
- Gran Viaje


El viaje comienza en Hanói, una ciudad marcada por su pasado colonial francés y desde la que iniciar la toma de contacto con un exótico país, conocido por la amabilidad de sus gentes y la seguridad que se respira en sus calles y caminos. En la capital del país hay que visitar el mausoleo de Ho Chi Minh, el Palacio del Gobernador, el Templo de la Literatura o las 36 calles que conforman el Barrio Antiguo de Hanói.
"El crucero por la Bahía de Halong permite entender por qué es considerada una de las siete maravillas naturales del mundo"
Atravesando los campos de arroz del río Rojo se llega a la Bahía de Halong, donde comienza un crucero de dos días para admirar las más de 1.600 islas e islotes que emergen del agua casi como por arte de magia. La siguiente experiencia es Hoi An, un importante puerto comercial de los siglos XV y XIX que mantiene su relajado estilo de vida, donde se puede visitar el famoso Puente Japonés de más de 400 años de antigüedad o el templo chino de Phuc Kien. A continuación llega la preciosa Hue, antigua capital imperial que acoge la pagoda de Thien Mu, una de las imágenes más conocidas de Vietnam, así como el romántico Río de los Perfumes. Y desde allí se llega a la última etapa del viaje, Ho Chi Minh, la ciudad más poblada del país y punto de partida para una fascinante visita: el Delta del Mekong, un mundo diferente plagado de coloridos puestos ambulantes flotantes en los que probar algunos de los deliciosos productos locales. De vuelta a esta bulliciosa ciudad podremos visitar la catedral de Notre Dame, un claro ejemplo del pasado colonial francés de la ciudad, o la antigua Oficina Central de Correos, obra de Gustave Eiffel.
Emociones nuevas en tu viaje
Para conocer un país tal como lo viven sus habitantes es fundamental tomarle el pulso a sus ciudades. Por ello, durante el viaje a Hanói lo mejor es aprovechar la ocasión de pasear sin rumbo fijo por las 36 calles que forman el casco antiguo de esta urbe.
Es recomendable dar primero un paseo sobre un ‘cyclo’ (un carrito empujado por una bicicleta) para abrir boca y luego dejarse llevar por las calles para mezclarse con las personas y los negocios que llenan esta zona. El gran número de tiendas que pueblan el casco antiguo hace también de Hanói un paraíso para los amantes de las compras. Y entre compra y compra, nada mejor que reponer fuerzas con el aromático café vietnamita. Resulta también impresionante el gran número de motos que pueblan las calles de la ciudad, ya que es el medio de transporte favorito en este país, y la amabilidad de los habitantes de la ciudad.

El café de Vietnam no sólo tiene un sabor especialmente aromático y suele acompañarse con leche condensada, por lo que no hace falta añadir azúcar, sino que su preparación es también peculiar, ya que utilizan unas pequeñas cafeteras individuales que funcionan con un filtro metálico de goteo. Es habitual servirlo con hielo, así como sustituir la leche condensada por yema de huevo, algo que suaviza el sabor del café además de otorgarle una textura más cremosa.
En Hanói, la capital de Vietnam y una de las ciudades más antiguas del país, es imprescindible visitar el mausoleo de Ho Chi Minh, donde descansan los restos del líder comunista que condujo al país a la independencia. Para los vietnamitas el mausoleo roza lo sagrado y es una peregrinación que hay que hacer. Es uno de los monumentos más importantes de la historia de Vietnam y es un lugar casi faraónico que poco tiene que ver con las últimas voluntades del líder vietnamita, ya que su deseo era ser incinerado y esparcido por diversos puntos del país.
Al lado del mausoleo está su casa, construida sobre pilotes. Una visita muy interesante para conocer cómo vivía realmente el dirigente. Fue el propio Ho Chi Minh quien mandó construir esa casa, ya que consideraba que él no podía vivir en el Palacio Presidencial viendo cómo estaba la situación de su pueblo. Cerca del mausoleo está la famosa pagoda del pilar único, uno de los iconos de la ciudad. Su peculiar estructura, inspirada en la flor de loto, ha convertido este templo budista en una visita obligatoria.

El Mausoleo de Ho Chi Minh está fabricado con mármol extraído de uno de los refugios del Viet Cong, situado en las montañas de Da Nang, Su exterior es espectacular y su interior muy solemne. Para poder visitar la tumba de Ho Chi Minh se tienen que tener presentes una serie de normas: mostrar una actitud respetuosa, estar en silencio, no llevar ropa indecorosa y los hombros de las mujeres tienen que estar cubiertos. Además, es recomendable ir temprano, ya que se forman largas colas de turistas curiosos y residentes que van a visitar al que fue su líder.
Es una de las imágenes más típicas de Vietnam y no es para menos. Las aproximadamente 1.600 islas e islotes de piedra caliza que pueblan esta gran bahía en el Mar de China constituyen un espectáculo impresionante para cualquier visitante.
No en vano fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y es también una de las Siete Maravillas Naturales del Mundo. La tranquila navegación en un típico ‘junco’ oriental permite contemplar en calma y silencio estos gigantes pétreos de caprichosas formas.

Las formaciones de roca kárstica de esta bahía no sólo impresionan a los visitantes de este país, sino que como buen lugar casi mágico cuenta desde hace tiempo con su propia leyenda. Se dice que hace muchos, muchos años, durante la época en la que los lugareños luchaban contra los invasores chinos, el Emperador de Jade pidió ayuda a una familia de dragones que escupieron joyas de jade para formar una barrera contra los barcos enemigos y éstas se convirtieron en rocas. Según esta misma leyenda, los dragones se quedaron para siempre a vivir en la bahía.
Además de visitar los puntos más interesantes de la ciudad de Hoi An, de relevancia en los siglos XV a XIX como puerto comercial, una de las experiencias más divertidas puede ser la de encargar un traje a medida y recibirlo totalmente acabado en menos de 24 horas. De hecho, esta actividad está muy extendida por toda la ciudad, por lo que hay numerosas sastrerías en las que dejar el encargo.
Si no se desea perder mucho tiempo eligiendo el modelo, es recomendable llevar una foto o patrón de la vestimenta que se desea adquirir, ya que la gran pericia de estos sastres les permite adaptarse a casi cualquier petición.

Hoi An tiene muchos puntos de interés, pero uno de los más llamativos es el de la playa de Cua Dai, ya que da la sensación de haberse trasladado sin darse cuenta hasta otras latitudes. La típica estampa caribeña de arena blanca y aguas turquesas en las que disfrutar de un buen baño supone un fuerte contraste con la esencia asiática que se puede percibir a lo largo de todo el viaje por Vietnam.
La gastronomía de Vietnam es similar en todas las regiones, pero en cada una de ellas presenta ciertas peculiaridades. El plato más popular de Hue es la sopa Bun Bo, una delicia para el paladar que mantiene un perfecto equilibrio con los sabores picantes y dulces del caldo.
Es una sopa que se sirve caliente y está compuesta por fideos de pasta de arroz, además de carne de ternera y codillo de cerdo. Lo acompañan diversos vegetales y especias que le dan un toque picante. Relajarse en uno de los restaurantes locales y pedir este plato típico de Hue es ideal para adentrarse en la cultura gastronómica de esta ciudad imperial.

Hue es una ciudad cargada de historia. La Ciudadela de Hue es una maravilla arquitectónica que fue construida por los franceses. Servía como fortaleza y a su vez como residencia imperial. Actualmente, la zona de palacios y estancias imperiales que están dentro de la ciudadela se conocen como la ciudad prohibida de Hue ya que el emperador castigaba con la muerte a todo aquel que intentara acceder a la ciudad sin permiso.
Pasear por Ho Chi Minh, la antigua Saigón, da la posibilidad de entrar en contacto con diversos momentos de su pasado más reciente. Es un placer recorrer sus bulliciosas y animadas calles, mercados y museos, pero también ha sido plató de rodaje de películas como Apocalypse Now y Platoon sobre la Guerra de Vietnam, un conflicto al que es posible acercarse con una visita al Museo de los Recuerdos de la Guerra.
También es conveniente visitar el Palacio de la Reunificación, que se encuentra en pleno corazón de la ciudad. Construido en la época de los setenta, en él se pueden visitar estancias presidenciales y habitaciones privadas. Y también muy cerca de este Palacio se encuentran la Catedral de Notre Dame, construida por los franceses en la época colonial, y la Oficina Central de Correos, una obra de Gustave Eiffel, sí, el mismo que la famosa torre parisina.

Ho Chi Minh es el punto de acceso al espectacular Delta del Mekong, uno de los ríos más míticos del mundo, ya que sus aguas atraviesan varios países, y uno de los graneros de Vietnam, un país con una ingente producción de arroz. Realizar una travesía en barco por sus canales permite acercarse no sólo a los arrozales sino a la rica vegetación tropical y las casas que en ellas habitan. Una de sus grandes atracciones son los mercados flotantes, donde en las primeras horas de la mañana se pueden adquirir todo tipo de productos frescos.
El plan de viaje a tu alcance
- Sin comidas.
- Hanoi
- Sin comidas.
- Hanoi
- Desayuno. Comida.
- Hanoi
- Panorámica de Hanói
- Desayuno. Comida. Cena.
- Ha Long
- Navegación por la Bahía de Halong
Después de un buen desayuno nos subiremos a un vehículo que nos llevará por carretera hasta la Bahía de Halong, un precioso enclave natural que no deja a nadie indiferente. Este lugar rebosa belleza y consigue enamorar a los viajeros que, por primera vez, lo visitan.
El paisaje desde Hanói hasta la bahía también roba sonrisas y provoca agradables sensaciones, ya que en él se divisan los enormes y verdes campos de arroz y los búfalos de agua pastando en ellos.
Al llegar al embarcadero de la Bahía de Halong nos subiremos a una embarcación tradicional de madera, llamada ‘junco’ que nos llevará a recorrer las preciosas aguas de este paraje. El silencio reinará a nuestro alrededor y mientras disfrutamos de la estampa que está ante nuestros ojos, saboreamos un delicioso almuerzo vietnamita. Con el estómago lleno, la mente en blanco y con grandes expectativas continuaremos navegando mientras descubrimos las más de 1.600 rocas kársticas que conforman la bahía.
- Desayuno. Brunch.
- Hanoi
- Da Nang
- Hoi An
- Navegación por la Bahía de Halong
- Demostración de Taichi
- Desayuno. Comida.
- Hoi An
- Panorámica de Hoi An
- Desayuno. Comida.
- Hue
- Museo Cham
- Mausoleos de los emperadores
- Desayuno. Comida.
- Ho Chi Minh
- Paseo en barco por el Río de los Perfumes
- Ciudadela Imperial de Hue
- Pagoda de Thien Mu
- Desayuno. Comida.
- Ho Chi Minh
- Delta del Mekong
- Panorámica de Ho Chi Minh
- Desayuno.
- Ho Chi Minh
- Según itinerario
- España
¿Quieres saber más de Vietnam?
La gastronomía vietnamita es tan rica y variada que más que un atractivo de este país podría considerarse como un destino en sí misma. El hecho de que Vietnam sea un país de una extensión considerable y alargado le permite disfrutar de diferentes paisajes y, por tanto, también de gastronomía diversa entre el norte y el sur, si bien tienen elementos comunes, como el gusto por el picante o la gran variedad de sopas que se pueden encontrar en toda su geografía.
Si hay que elegir un plato nacional tal vez el Pho sería el acertado. Se trata de una sopa de fideos de arroz muy sabrosa gracias a las hierbas con que se elabora y de la que pueden encontrarse varias versiones, aunque las más clásicas son las de ternera o pollo. Esta cocina tiene también recuerdos de su pasado colonial, como por ejemplo el hecho de que se pueda comprar un pan que recuerda a una pequeña baguette francesa, a la que ellos llaman bahn mi, que significa ‘pan de trigo’.
Centros comerciales, tiendas, mercadillos… Vietnam es un paraíso para los amantes de las compras, tanto por su variedad como por su precio, esto último siempre que sea un producto fabricado en el país. Los precios no son fijos, ya que están acostumbrados al regateo, así que el viajero puede negociar la cantidad que pagará finalmente. Generalmente, los precios son más bajos en el sur del país que en el norte. Además, se obtienen mejores condiciones en los mercadillos que en las tiendas y si se paga en dongs en lugar de en dólares o euros, sobre todo porque de estos últimos sólo se aceptan billetes, no monedas, así que el precio podría ser redondeado en detrimento del viajero.
Este país es uno de los reyes en productos que replican marcas más caras, pero su falsificación no está permitida, por lo que en los lugares en los que las tienen no están a la vista. Además, hay algunos lugares, como la ciudad de Hoi An, que están especializados en realizar trajes a medida en tiempo récord. Lo que es seguro es que el viajero volverá de Vietnam con algunos recuerdos, por lo que es buena idea no llevar la maleta muy llena para dejar espacio para las compras.
La multiculturalidad y larga historia de Vietnam hace que este país celebre varias fiestas oficiales, que están marcadas por la religión.
•1 de enero: Año Nuevo, ya que aunque celebran su año nuevo lunar más adelante, sí acogen el nuevo año internacional con un día de fiesta nacional.
•Entre enero y febrero: Fiesta del Tet, el Año Nuevo vietnamita, que al seguir el calendario lunar cambia de fecha cada año, aunque suele celebrarse entre finales de enero y mediados de febrero.
•3 de febrero: Día de la Fundación, que conmemora la creación del Partido Comunista de Vietnam.
•Marzo/Abril: Aniversario de la muerte de los Reyes Hung, sin fecha fija al seguir el calendario lunar.
•30 abril: Día de la Liberación del Sur y de la Reunión, con el que se celebra la reunificación del país tras la larga Guerra de Vietnam.
•1 mayo: Día Internacional del Trabajo.
•2 y 3 septiembre: Día de la Independencia, que conmemora la declaración de independencia por parte de Ho Chi Minh que marcó el fin del colonialismo francés en el país.
Los españoles no necesitamos visado para ir a Vietnam, siempre que las estancias no superen los 15 días incluyendo los días de llegada y salida. Debemos asegurarnos de que el pasaporte esté en vigor y con al menos seis meses de validez desde la fecha de entrada en el país. Si no es así, lo mejor es pedir cita cuanto antes para obtenerlo o renovarlo en el teléfono 060 o en la web www.citapreviadnie.es. Para cualquier consulta que se quiera realizar sobre estas cuestiones Vietnam cuenta con Embajada en España, cuyos datos de contacto son los siguientes:
Avenida Alfonso XIII, 54 - 28016 Madrid
Para viajar a Vietnam desde España no es necesaria ninguna vacuna específica, salvo que en el último mes se haya visitado alguno de los países en los que sí existe riesgo de transmisión de la fiebre amarilla (esta información puede consultarse en el link). En países cálidos y con un nivel elevado de humedad, como en Vietnam, es fundamental llevar un repelente para mosquitos, que debe aplicarse sobre todo en las horas del amanecer y el atardecer, que es cuando estos insectos están más activos.
En cuanto a los riesgos sanitarios, por lo general basta con tener algo de cuidado para evitar malestares gastrointestinales. Así, es mejor evitar tomar hielo en las bebidas, descartar alimentos crudos y apostar por el agua embotellada. En cuanto al vino de arroz, muy típico en los países del Sudeste Asiático, el Ministerio de Exteriores recomienda expresamente evitar aquellos caseros o de origen desconocido ya que pueden llegar a ser peligrosos para la salud. Las infraestructuras sanitarias en este país son algo deficientes, por lo que es recomendable viajar con un seguro médico con una cobertura amplia ante algún problema de salud que pueda presentarse.